la Opinion

Catatumbo, un tesoro turístico por explorar

Esta subregión tiene importantes retos de infraestructura y orden público para desarrollarse como un destino atractivo para turistas nacionales y extranjeros.

Iván Rodríguez Presidente de Cotelco, capítulo Norte de Santander

En lengua Barí, el Catatumbo es la “casa del trueno”, una subregión de Norte de Santander que cuenta con un potencial turístico gigante, que entrelaza de forma homogénea en cada uno de los municipios que lo componen la belleza de la naturaleza, la riqueza de la cultura y el valor de la tradición.

La subregión del Catatumbo está compuesta por 11 municipios: Ábrego, Convención, El Carmen, El Tarra, Hacarí, La Playa, Ocaña, San Calixto, Sardinata, Teorama y Tibú. Estos territorios cuentan con atractivos turísticos de todo tipo, muchos aún no han sido explotados, y son perlas escondidas en Norte de Santander.

Análisis de expertos del turismo en el departamento, destacan que el Catatumbo es una zona muy rica en patrimonio natural y cultural, en especial, los tres parques nacionales que están ubicados en el territorio, como son el Área Natural Única Los Estoraques, el Parque Nacional Natural Catatumbo Barí, y el Parque Nacional Natural Tamá.

Explorar la naturaleza

Según los registros del Sustainable Travel Report de Booking.com, el 87% de los viajeros a nivel mundial desean hacerlo a través de un turismo sustentable con poco impacto al medio ambiente y sobre las comunidades que visitan.

Esta tendencia que empezó aumentar a partir de la pandemia del Covid-19, demuestra el valor del ecoturismo y de su mercado, que, según estimaciones de expertos, en 2022 generó 195.000 millones de dólares a escala mundial, y se estima que registre una tasa de crecimiento anual compuesto de 5,7% hasta el 2028.

En el marco de un mundo en el que cada vez más viajeros desean conocer lugares naturales, sustentables y llenos de diversidad, la subregión del Catatumbo tiene parques naturales con la capacidad de brindar esas experiencias únicas que buscan los turistas nacionales y extranjeros.

El Área Natural Única Los Estoraques cuenta con valores ecológicos y geológicos excepcionales además de rasgos no representados en otras áreas protegidas de Colombia, que se expresan en su geomorfología, aspectos biofísicos de sus ecosistemas, y en la fauna y flora endémica característica del lugar.

Además, en este parque nacional hay condiciones para realizar diferentes actividades ecoturísticas como el ciclomontañismo, el senderismo, la investigación, y la observación de aves, fauna y flora, geología, mariposas y estrellas.

Sin embargo, en este momento el área protegida no ofrece estos servicios ecoturísticos, porque se encuentra en proceso de formulación del Plan de Ordenamiento Ecoturístico y se adelantan obras de infraestructura liviana asociada a la atención de visitantes.

Por el momento, guías e intérpretes locales son quienes desarrollan actividades en predio privados, bajo supervisión y acompañamientos de Parques Nacionales Naturales de Colombia.

Lograr la consecución de un plan público que explote el potencial de Los Estoraques es un reto clave para la región, y para que se pueda aprovechar la creciente tendencia del ecoturismo en uno de los lugares naturales más icónicos y valiosos de Norte de Santander.

La cultura ancestral

Colombia es un país reconocido a nivel mundial por su diversidad cultural, por lo que es un territorio ideal para iniciativas de turismo étnico o cultural que contribuyan al desarrollo y la sostenibilidad de las comunidades.

El objetivo de este tipo de turismo es realizar actividades para potenciar la salud física, mental y espiritual, y en ese escenario los pueblos indígenas tienen mucho para ofrecer, enseñando costumbres y tradiciones, sin que esto ocasione un deterioro de su cultura.

En el Parque Nacional Catatumbo Barí se encuentran más de dos tribus indígenas, y esto tiene un enorme potencial para desarrollar líneas de turismo étnico o turismo comunitario con las comunidades de la zona, como la Motilón Barí.

Los pueblos patrimonio

El patrimonio es nuestra mayor riqueza para mostrarle al mundo, este se concibe como un legado del pasado, el equipaje en el presente y la herencia que dejaremos a las futuras generaciones.

Por eso, en Colombia se implementa la Red Turística de Pueblos Patrimonio, un programa especial del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, ejecutado por el Fondo Nacional de Turismo (Fontur) para trabajar en el fomento del desarrollo sostenible, y la participación de la comunidad

en el progreso de los municipios que reúnen mayor valor histórico y que concentran el panorama turístico del país.

En el Catatumbo hay un pueblo que hace parte de esta red, La Playa de Belén, el pesebre viviente. Un municipio que destaca por la uniformidad de las fachadas de sus viviendas, en las que cuelgan masetas artesanales con flores y faroles.

La Playa de Belén cuenta con atracciones ecoturísticas como Los Estoraques, el Mirador de Santa Cruz, El Paso de las Ánimas, la Cueva de la Gringa, La Chorrera, El Obispo, entre otras formaciones y figuras que se pueden encontrar recorriendo el municipio. Este es uno de los municipios que debería ser insignia de la región.

Los retos para el turismo

A pesar del potencial que se tiene para desarrollar líneas de turismo moderno como las mencionadas, la subregión del Catatumbo tiene importantes retos de infraestructura y orden público para poder desarrollarse como un destino atractivo para turistas nacionales y extranjeros.

Afiliados del capítulo regional de Cotelco han identificado que la seguridad pública es un factor muy importante para la actividad turística, el estigma que se tiene de que la zona es peligrosa y el miedo que a veces tiene la gente de visitarlos es un obstáculo grande para el sector.

Por otra parte, la conectividad en la región también se ha visto afectada, pues desde el pasado 31 de mayo de 2023, la vía que comunica a Cúcuta con el municipio de Ocaña está cerrada en el sector conocido como El Tarrita, tras la avalancha de lodo y tierra que generó la destrucción de una parte de la carretera entre los municipios de Ábrego y Villa Caro.

Esta es una situación que ha afectado bastante la ocupación, haciendo que los hoteleros de esa zona están viviendo un período muy difícil porque la mayoría de los huéspedes que los visitan son turistas de negocios, y llegan a Cúcuta para trasladarse a Ocaña por tierra. Por eso, hacemos un llamado para que se pueda dar una pronta solución para que la región recupere la conectividad.

TABLE DE CONTENIDO

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2023-10-29T07:00:00.0000000Z

2023-10-29T07:00:00.0000000Z

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La Opinion de Cucuta