¿Cómo marcha el sector palmicultor en Norte de Santander?

El Catatumbo es una región con muchas fortalezas para la palmicultura debido a las condiciones de los suelos, la luminosidad y el agua.

El sector palmero colombiano es un motor de transformación sostenible e inclusivo del campo, que durante 2022 llegó a las 580.000 hectáreas sembradas en palma de aceite en el territorio.

Está conformado por cerca de 7.000 productores, de los cuales 1.750 están en Norte de Santander, siendo 87 % de ellos de pequeña escala y 37 % mujeres.

En 2022, del millón ochocientas mil toneladas de aceite que se produjeron en Colombia, 136 mil (8 %) se produjeron en el Catatumbo.

Con 36.800 hectáreas sembradas en ocho municipios, (de 40 que tiene Norte de Santander), Tibú es el más representativo (con 26.000 hectáreas), le siguen El Zulia, Cúcuta, Sardinata, La Esperanza, Puerto Santander, Teorama y Cáchira; y cinco plantas extractoras.

El cultivo de palma de aceite ya representa casi 40% del PIB agrícola de Norte de Santander, convirtiéndose en el primer sector agrícola del departamento y representando, a su vez, 22 % de los cultivos del agro de la región.

El 70 % de los productores trabaja a través de esquemas asociativos, siendo un sector que genera alrededor 12.200 empleos, beneficiando a cerca de 15.000 familias de productores y empleados en la región.

De las cinco plantas extractoras que operan en el Catatumbo, una de estas, inició operaciones en el pasado mes de agosto y hay una próxima que está en etapa de construcción, lo cual completaría seis núcleos palmeros para este departamento.

El Catatumbo es una región con muchas fortalezas para la palmicultura debido a las condiciones de los suelos, la luminosidad y el agua, un conjunto de condiciones que acompañadas de buenas prácticas de productividad y sostenibilidad, hacen de éste, un cultivo promisorio para la región y especialmente para los productores de pequeña escala.

Desde Fedepalma y Cenipalma se trabaja para fortalecer a los núcleos palmeros por medio de la asistencia técnica planificada y, de esta forma, llegar a todos los productores del departamento.

Panorama 2022: Exportaciones, productividad y Clúster

De las 136.000 toneladas que se produjeron en Norte de Santander durante el año anterior, 36 % de ellas tuvo destino exportador.

Norte de Santander maneja un promedio de 4.4 toneladas de aceite por hectárea año y es la región que muestra una de las mejores productividades en la zona central del país, lo que representa el potencial regional de este departamento cuando hablamos de que se encuentra por encima de las 3,63 toneladas del aceite crudo de palma que produce Colombia.

La zona central cuenta con alrededor de 200.000 hectáreas sembradas, y Norte de Santander con sus 36.800 hectáreas, equivale a 18.4 % en área sembrada.

Cabe destacar también que en 2022 se logró un hito para la palmicultura de Norte de Santander con la puesta en marcha del

36 mil hectáreas sembradas tiene el departamento.

Clúster de Palma Productiva y Sostenible, gracias al trabajo articulado entre la Cámara de Comercio de Cúcuta, la Gobernación de Norte de Santander, la Comisión Regional de Competitividad e Innovación de Norte de Santander, Fedepalma, Cenipalma, la academia y los palmicultores, con el fin de continuar fortaleciendo a los productores e impulsar los proyectos estratégicos del sector para este departamento.

Esta iniciativa se fundamenta en cinco líneas estratégicas que son: sostenibilidad, productividad, innovación, mercado y talento humano.

Panorama 2023

En 2010 Norte Santander tenía una capacidad instalada de procesamiento de 10 toneladas de racimos de fruto fresca por hora y en la actualidad se cuenta con una capacidad de 160, lo cual muestra un crecimiento significativo para la región en los últimos 13 años y representa una oportunidad, dado el potencial para crecer en siembras y cumplir con la oferta de capacidad instalada en las plantas extractoras.

De enero a julio de 2023, se produjeron 80.325 toneladas de aceite crudo de palma, comparado con el año anterior que fueron 70.717 toneladas, lo que significa un crecimiento de 13.6 %.

Norte de Santander es un departamento donde predomina el pequeño productor y es ejemplo de asociatividad con 21 asociaciones conformadas por 848 cultivadores de palma de aceite.

Retos 2024

Norte de Santander teniendo un potencial de crecimiento tan alto, está llamado a cumplir con la norma de cero deforestación y crecer en sus cultivos de palma y producción de aceite de manera sostenible.

En el marco de estas tendencias de mercado, asociadas con garantizar productos y cadenas agrícolas sostenibles, hoy es una realidad la reglamentación sobre Deforestación y Debida Diligencia aprobada en la Unión Europea.

Esta normativa busca promover cadenas de suministro libres de deforestación y un comportamiento empresarial responsable, restringiendo el mercado para aquellos productos que no puedan demostrar que están libres de deforestación a partir del 1 enero del 2021 y exigiendo una declaración de debida diligencia en derechos humanos y cumplimiento de la legislación del país de origen de la producción. La cero deforestación es parte esencial de nuestra apuesta de diferenciación como sector y cada día reforzamos más nuestro compromiso.

El rol de la investigación y la asistencia técnica es clave para dar respuesta y acompañar a los pequeños productores del departamento. Parte de nuestra tarea es comprender mejor los efectos a largo plazo, la variabilidad climática sobre el cultivo e identificar alternativas para mitigar los efectos negativos del clima y la problemática fitosanitaria.

Nuestros avances también son visibles en la certificación de palmicultores y plantas de beneficio bajo el Protocolo Apscolombia (Aceite de Palma Sostenible de Colombia). Entendiendo la importancia que este proceso tiene de cara al mercado y con el objetivo de garantizar que todos los palmeros del país logren altos estándares de sostenibilidad en la producción de aceite de palma.

Fedepalma se ha trazado la meta de lograr en tres años el cierre de brechas y la certificación APSCO de nuestros productores de pequeña escala en Norte de Santander.

Dentro de los retos también hay que hablar de la inseguridad creciente que azota el agro y por ende al sector palmicultor. En el Catatumbo la acción de los violentos no para y por ello, sus pobladores sienten que cada día aumenta la presión de los ilegales en la región y los indicadores de seguridad muestran grave deterioro.

Los comerciantes, agricultores, palmicultores, transportadores, empresas de servicios públicos, trabajadores de la administración y la ciudadanía en general, resisten la acción de los violentos y hacen nuevamente un llamado a las autoridades nacionales y regionales y también a las personas que están por fuera de la ley con estas acciones, para que permitan que se recupere la dinámica de desarrollo en la región.

Las afectaciones y acciones de los grupos ilegales Gao Eln y Gao-r Farc se manifiestan en extorsión, boleteo, hurto de maquinaria, vehículos e insumos agrícolas, entre otros.

En la actualidad, la inseguridad impera sobre las vías que unen la región del Catatumbo con la capital del departamento y el centro del país.

El llamado al Gobierno es a avanzar en acciones urgentes y contundentes, en coordinación con las autoridades pertinentes para encontrar vías de solución.

Las estructuras delictivas que delinquen en la región se encuentran actualmente en procesos de diálogo con el Gobierno y en este sentido el clamor regional es que se llegue a consensos, acuerdos y compromisos, orientados a que cesen los hostigamientos hacia la población civil.

(*) Con alcance a Santander - Norte de Santander - Sur del Cesar - Sur de Bolívar - Tolima Oriente de Antioquia - Occidente de Cundinamarca - Caldas.